Lesiones como esguinces, distorsiones, contusiones, hematomas y hemartros, fracturas óseas, edemas posquirúrgicos y postraumáticos, tumefacción de partes blandas. Procesos inflamatorios asociados a diferentes órganos y tejidos, especialmente en el aparato locomotor y ligamentos (tendovaginitis, estiloiditis, epicondilitis, bursitis, periartritis escapulohumeral etc.), artrosis de la cadera, rodilla y pequeñas articulaciones.

En afecciones agudas, diariamente; en general, 3-1 veces por semana 1-2 ampollas i.m., s.c., i.d., i.v. (eventualmente aplicar en pápulas subcutáneas), intraarticularmente, periarticularmente.

Hipersensibilidad a alguno de los principios activos o de los excipientes o árnica, camomila, aquilea o a otras plantas de la familia de las compuestas. En principio, Echinacea no debe utilizarse en enfermedades sistémicas progresivas, como tuberculosis, leucemia o patologías relacionadas con la leucemia, enfermedades inflamatorias del tejido conectivo (afecciones del colágeno), enfermedades autoinmunes, esclerosis múltiple, SIDA, infección por VIH y otras enfermedades víricas crónicas.

No se dispone de experiencias documentadas suficientes sobre la aplicación de este medicamento en niños. Por ello, no se debe utilizar en niños menores de 12 años sin consulta con el médico. Al no disponer de experiencias documentadas suficientes, este medicamento sólo se deberá utilizar durante el embarazo y la lactancia previa consulta con el médico.

Mantener a una temperatura no mayor a 30 °C. Proteger de la luz solar directa.